Lineas ParaRelas Es una falta de ortografía con patas.

lunes, 31 de enero de 2011

Chico malo

Sacando al perro un anciano, en moto, que eso es lo mejor, me ha dicho en el campo:
-¡Cuidado con las cabras, no vaya a ser que tu perro las espante!
En efecto mi can, de raza cazadora, nervioso, se ha quedado pasmado viendo a los animalejos, con el rabo erizado. Acojonado, vamos. Ha sido decirle que volviera para ir directo a las cabras. 
Temía lo peor. Una vez se encontró un conejo lenturrón y lo remató. No es su culpa. Es su instinto.
Las cabras pusieron pies en polvorosa, el viejo soltó un par de maldiciones y el perro volvió dócilmente al lado de su amo despúes de recibir un par de gritos como castigo.
Mientras veía correr a los cabritillos por el campo espantados ante el gran loco que era mi perro, no pude evitar sentirme malvado por haber entorpecido el tranquilo viaje de los animalitos. Pero me reí malévolamente de ver al viejo correr.

lunes, 24 de enero de 2011

¿Una ideología actual?

¿Aún hay auténticas revoluciones ideológicas?


Francis Fukuyama postuló en su libro El fin de la historia y el último hombre, de 1992, la llegada próxima de un fenómeno que denominaría como fin de la historia. Esta tesis neoliberal concibe la actualidad como una macedonia de ideas sin posibilidad de nuevas iniciativas. En primer lugar, de ideas liberales, pero también de influencia marxista histórica.
El fin de la historia significaría el fin de las guerras y las revoluciones sangrientas. Los hombres satisfarían sus necesidades a través de la actividad económica sin tener que arriesgar sus vidas en ese tipo de batallas.

Tras la Caída del Muro se habría demostrado que uno de los dos sistemas que monopolizaban la política era inviable, acarreando el cercenamiento del árbol de las ideologías: a partir de ese momento, todos los movimientos nacerían de una base neoliberal, y por tanto no se darían nuevas ideologías. Ese fin de la historia, por tanto, no sería literal; constituiría la muerta ideológica y reivindicativa del hombre en un contexto democrático.

Sin embargo, aunque es cierto que el ser humano dejaría de soñar con nuevas alternativas políticas, sería premisa necesaria en el fin de la historia la disposición de un libre mercado, la existencia de gobiernos representativos y democráticos y un mantenimiento de los derechos jurídicos. En otras palabras, una democracia neoliberal expandida por todo el mundo sería el marco donde se fraguaría este fin de la historia.

Otra condición vital para el fin de la historia sería -y en esto critica Kojéve- la generalización de estas características antes dichas, pero añadiendo una equiparación universal, esto es, la eliminación de las diferencias de desarrollo entre países: se llega al fin de la historia cuando se tiene un buen gobierno, un buen país, un correcto desarrollo, una buena democracia, un libre mercado y unos buenos derechos. Por tanto, países como EEUU estarían más próximos de este estadio que otros como Haití.

Este planteamiento no es intervencionista. Al contrario. Fukuyama defiende la liberación de los mercados, pero dice que el fin de la historia llegará a un país que haya llegado a su pico más alto de evolución. Un país. Para que se de el fin de la historia a nivel global será necesario que todo el mundo esté nivelado económicamente. Hasta que Haití no llegué al nivel de desarrollo de Alemania el mundo no conocerá el fin de la historia.

¿Se llegaría a una culminación política? Imaginad el panorama distópico de 1984 aplicado a una democracia actual, en la que las motivaciones de le gente fueran nulas y la participación política inexistente, pero no por ser una dictadura, sino al contrario; por tener sucesivos gobiernos satisfactorios que desmotivaran cualquier critica

¿Sería mejor? Diríamos rápidamente que no -yo incluido-, pero no debemos olvidar que el fin último de la política es organizar nuestras vidas para llevarlas mejor. Si llegáramos a un estadio de perfección colectica y generalizada, ¿seguiría siendo preciso un gobierno común? Lo que ansiamos desesperadamente es llegar a un momento político de perfección, en el cual no haya paro, violencia, desilusión, mala educación... Sin embargo, si llegara, ¿qué haríamos? Es una falacia. Si llegáramos a eso no haría falta una organización política porque seríamos perfectos y en palabras de Hobbes, nos nos mataríamos por nuestra condición de humanos. Y ese es, al menos para él, el motivo por el que existe el gobierno.

El ser humano no llegará a ese fin de la historia

Pero es que además eso también es una falacia. El ser humano no llegará ese fin de la historia porque, al igual que la economía, no es algo teleológico; no culmina en un fin determinado. Las continuas necesidades del hombres serán eternas, y sus recursos naturales, finitos. El fin de la historia no llegará. Pero desconozco si puedo decir lo mismo de un ciclo histórico.

miércoles, 19 de enero de 2011

El secreto de sus ojos

Todo el mundo tiene una obsesión. La necesita para vivir. Puede ser sana -un hobby- o enfermiza -un vicio-. Puede ser escribir letras en cientos de folios porque tu máquina de escribir ha pasado a mejor vida. O puede ser mirar al amor de tu vida en silencio enterrando bajo cemento frío tus sentimientos. Puede ser cometer violaciones. Resolver crímenes. Escribir libros.

La película galardona con el Óscar a Mejor Película de Habla No Inglesa es una obra de arte.  Ricardo Darín hace de escritor frustado, envejecido ante el paso de los acontecimientos y el ir y venir de las cosas, y las oportunidades.


El acento argentino de la película no es un problema, es una aliciente. Su luz y su ambiente de los ochenta, y su tono clásico, son...puff, ¿qué decir? Boludo, adéntrate en este filme.

martes, 18 de enero de 2011

El barco

Otra hazaña de la televisión española

Anoche cometí el error de hacer zaping y dejarme engatusar por una serie española que acababa de empezar: heredero de El internado, os presento el Barco.



A ver, ¿por dónde empezar? ¿Por lo bueno o por lo malo? El único punto bueno que acepto en esta serie ha sido la valentía de llevarla a cabo que han tenido sus creadores, con la acción y el complejo guión que es necesario saber hacer para llevar la trama de un barco sin desvaríar (y que no implica que controlen). Pero a ver, siendo críticos, ¿quién no ha visto un guiño, quedándose corto uno, a Perdidos? Es una copia espectacular que reduce muchos sus puntos- ¡y que nadie diga que la trama no se desarrolla en una isla y que por tanto no constitute copia!-.

  • El guapetón de turno imita, por un lado, con su nombre, Ulises, a Desmond Hume, quien literalmente tenía esa función como héroe, y por otro, al irresistible chulo Sawyer.
  • La irresistiblemente buenachona hija del capitán es una Kate indiscutible.
  • La mujer misteriosa, científica, ¡es una Juliet Burke clara y dura! ¡Qué jeta que tienen algunos!
  • La música es, para el que ha seguido la serie, una burda imitación mal camuflada de los ritmos de acción trepidantes que en Lost acompañaban a los momentos álgidos.  La última melodía del capítulo -una obra de Giachino, o como se escriba- es el típico cierre con tambores del final de un capítulo lostiano. En serio, es igualita.
  • El capitán del barco puede salvarse de original, al igual que su segundo al mando, aunque misteriosamente me recuerdan a los capitanes de Battlestar Galactica...
  • La forma con la que se desarrolla la tormenta es un poco patético por los efectos visuales cutres que se han empleado. Aunque, para ser española, he de admitir que esa parte es de las mejores construidas.
  • Finalmente,  me ha rematado la aparición de un jorobado retrasado que es, en esa escena del comedor, la copia inequívoca de un instante del film El bosque, en la que un pueblo comiendo en su comedor miran aterrados la inmesidad del bosque que les rodea y la risa bobalicona del retrasado enerva a los aterrados pueblerinos.
  • Ah, y los niños no son estúpidos. Ya he visto en varias series que los tratan como si fueran críos de guardería, cuando a esa edad no he visto a ningún niño tan infantil. En serio, ¿dónde han visto niños que se traguen la explicación de un padre de que una tormenta es el bostezo de una nube?
  • Lo mejor de la serie es el momento revelatorio de que son los únicos supervivientes del planeta. Tiene muchísima intensidad cuando justo enseguida se cambia de tema y se empieza una comedia teen veraniega en la que las tías piden ansiosas que un varón les ponga crema en la espalda o los tíos se dedican a lucir abdominales y dejar la escena al binomio tía buena-chico malo.


En serio, malísima. Mi único consejo: empezar a ser originales, guionistas españoles. Habéis demostrado que podéis serlo.

viernes, 14 de enero de 2011

Battlestar Galactica



Los cylon fueron creados por los humanos.

Evolucionaron. Cuando tuvieron conciencia de sí mismos, se rebelaron.

Algunos tienen forma humana. Otros están programados para creer que lo son.

Y tienen un plan.  

Battlestar Galactica ha aparecido ante mí ante alabanzas cibernéticas que no me han defraudado: tiene lo mejor del cócktel explosivo de Lost junto a ciencia ficción, mitología y religión.


Pero, ¿en qué consiste?


En el futuro, o en el pasado, quién sabe, el ser humano ha anidado a lo largo y ancho del universo, en las denominadas Docen Colonias de Kobol, una por cada signo zodiacal. Ahora el hombre vive en paz descansando tras una guerra de más de cuarenta años contra los cylon, inocente de que sus enemigos se están reorganizando.

La tripulación de la nave Galáctica será la cabeza predominante de la nueva raza humana que vaga por el universo buscando un hogar místico profetizado por los antiguos llamado Tierra. Pero no estarán sólos;  tendrán que sortear problemas intestinos, tensiones invisibles que arrastrarán a los personajes lentamente hacia la traición, y también estarán atentos al acecho de los que llaman hijos de la humanidad.


¿Es conocida?

Con cuatro temporadas, capítulos onlinne exclusivos, películas entre seasons-finales y seasons-premiere, y una fama que le precede, BG se ha consagrado como una ciencia ficción real, de folletín, subersiva, soberbia, que desmenuza las dos caras del ser humano y reflexiona sobre el castigo recibido por la raza humana. Así esta nueva ciencia ficción real rompe con el tópico, por ejemplo, de idílica Stargate, donde el ser humano, y en general todos los personajes son buenos por naturaleza y los problemas que sufren los personajes son dulzones caprichos de los guionistas, depurables en la historia general.


¿Tú la recomiendas?


La recomiendo firmemente. Estoy viendo actualemente la segunda temporada, y sólo por los personajes de Gaius y Número Seis merecen la pena todos los capítulos, que son cortos, ligeros y en general individuales, aunque  avancen algo en la trama. El Capitán Adama y Laura Roslin son también personajes memorables, líderes fuertes con sus personales conflictos, marcados ambos por historias personales.

Por si fuera poco, hay acción, suspense, finales de capítulos lostianos que dejan la boca abierta y algo más importante: ambición. Ambición lenta, construida con los pies en la Tierra -nunca mejor dicho- , que se organiza para ser coherente y hace que la serie llegue al corazón del espectador.

martes, 11 de enero de 2011

V

Bienvenido a la Quinta Columna

¡Guau! ¡Qué pedazo de cambio de los capítulos de la primera a la segunda! V ha mejorado mucho su aspecto, su argumento, su guión... Ahora los guionistas parecen saber mejor qué quieren y cómo llegar a ello.  La primera temporada -no os engañaré- me decepcionó bastante. Los aires ochenteros bien conseguidos no eran suficientes. Los personajes apenas se conocían. Sin duda, los mejores son los Visitantes.

¿No sabéis de que va V? Mejor no os digo nada. Sorprenderos con el primer capítulo. Sin bien no es de lo mejorcito de la serie, sí encarna muy bien de qué irá y presenta a sus principales protagonistas.

Ah, dos curiosidades. La protagonista es Juliet, de Perdidos , y el término La Quinta Columna existe en la vida real. Hace alusión a los que, en guerra, residiendo en tierra enemiga, se muestran leales al bando enemigo.





 

viernes, 7 de enero de 2011

Lavado de cara y novedades

Como podéis comprobar, he cambiado el aspecto del blog sustancialmente. El clásico negro ha sido sustituido por un blanco más modernista, y la fotografía espacial que nos acompañaba siempre ha dado paso a una escena urbana más molona.

Por otro lado he cogido ideas de otros blogs que me han animado y me estoy planteando publicar una historia en el blog. Sería de tipo fantástica y todavía estoy estudiando cómo hacerlo para compatibilizarlo con la publicación de entradas normales. Aunque el mayor problema no será ese: tendré que recoger la historia de nuevo y recorregirla de nuevo para colgarla como Dios manda y... Líos míos que no os quieren entretener.


Eso sí, quiero compartir con vosotros esto: si encima de publicarla se da que nadie me comenta me pego un tiro. Prometido, eh.

Feliz año nuevo bloggero.
Tweets por @guillermardos